Permacultura
Permacultura
El origen de la permacultura se remonta al año 1970, cuando
dos ecologistas australianos, Bill Mollison y David Holmgren, comenzaron con el
desarrollo de una serie de ideas que tenían la esperanza de utilizar en la
creación de sistemas agrícolas estables. Esta era su respuesta al uso cada vez
más frecuente de métodos agroindustriales destructivos, populares tras la
Segunda Guerra Mundial pero que “de acuerdo a su criterio estaban envenenando
la tierra y el agua, reduciendo drásticamente la biodiversidad, y destruyendo
billones de toneladas de suelo que anteriormente mantenían paisajes fértiles
La Permacultura es un sistema de diseño que busca la
creación de asentamientos humanos sostenibles, ecológicamente sanos y viables
en materia económica. Asentamientos capaces de producir para satisfacer sus
necesidades, sin explotar recursos o contaminar, es decir, sostenibles a largo
plazo.
Un huerto de permacultura se guiará por la ética de la
permacultura del cuidado de la tierra, el cuidado de las personas y la
participación justa. Eso significa que no explotamos los recursos de la tierra,
como el suelo y el agua, para crear nuestros huertos. Al revés: los protegemos,
restauramos y revitalizamos – construyendo suelo, biodiversidad y mejorando los
recursos ecológicos. Usando métodos de permacultura, podemos cerrar los ciclos
de la biomasa, el agua y el carbono en nuestro huerto reutilizando y reciclando
los recursos a través de prácticas como el compostaje y el uso de aguas grises.
Podemos evitar la introducción de productos químicos, plásticos y otros
elementos no biodegradables y dañinos en nuestra práctica de huerto.
Ventajas y desventajas de un huerto orgánico
¿Cuáles son las ventajas y desventajas de la agricultura orgánica?
Esta agricultura surge con la necesidad de reducir y
eliminar los problemas que plantea la agricultura tradicional, consiguiendo las
siguientes ventajas:
Conservar la fertilidad del suelo.
Asegura la rotación de cultivos.
Disminuye la contaminación.
Preserva la calidad de los alimentos.
Disminuye los costes energéticos.
Cómo aplicar el huerto en casa
Lo primero que debemos hacer antes de empezar a montar
nuestro huerto en casa es decidir qué espacio le asignaremos. Esto es sumamente
importante, ya que determinará en gran medida el éxito o el fracaso de nuestro
proyecto. Para ello debes tener en cuenta algunas consideraciones:
Debe ser un lugar soleado, que cuente con luz natural el
máximo de horas posibles al día (no hace falta que sea luz directa, pero sí que
reciba la cantidad suficiente para alimentar las plantas que crezcan en él
Tienes que contar con una toma de agua cercana. Aunque esto
no es del todo imprescindible, te ahorrará tiempo y esfuerzos a la hora de
regar.
Es importante que el suelo cuente con un buen sistema de
drenaje y que canalice el agua sobrante hacia un desagüe o salida de agua. Si
instalas tu huerto en una galería o un espacio interior (ojo, recuerda: debe
contar con la suficiente luz natural), puedes compensar la ausencia de desagües
instalando bandejas que recojan el agua de riego sobrante.
Ten en cuenta que el espacio que ocupará el huerto se
ensuciará con facilidad (trasplantes, podas, riegos…). Toma las medidas que
creas oportunas para que esto no represente un problema añadido (puedes
delimitar el espacio colindante con tiestos u otros elementos decorativos y así
te ahorrarás muchos quebraderos de cabeza en el futuro).
Una vez decidido dónde vas a emplazar tu huerto, ya puedes
ponerte manos a la obra. Toma aire, reúne a los de casa y prepárate para
empezar esta pequeña aventura, tan saludable y pedagógica como ecológica y
sostenible.
Conclusiones y recomendaciones
La permacultura es parte de la creciente comunidad de
disciplinas del eco-agricultura. Está ganando aceptación rápidamente como una
metodología de diseño valiosa en instituciones tanto no-gubernamentales como
gubernamentales en todo el mundo
HUERTO CASERO
MATERIALES
- PLANTAS
- TIERRA PARA CEMBRAR
- ABONO
- CANASTA
- PLASTICO PARA QUE NO PASE LA TIERRA
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